Tras una reñida contienda en los "estados bisagra", Donald Trump volverá a la Casa Blanca tras vencer a la actual vicepresidenta Kamala Harris en las elecciones de 2024.
Su campaña se enfocó en revitalizar la economía y atender temas de seguridad nacional, donde logró conectar especialmente con el electorado de las zonas desindustrializadas y con dificultades económicas.
Con el apoyo clave de figuras influyentes como Elon Musk, Trump movilizó a votantes masculinos jóvenes a través de apariciones en plataformas digitales y podcasts populares. Esto, sumado a un esfuerzo en redes sociales, consolidó su respaldo en un sector que buscaba alternativas en medio de la polarización política de Estados Unidos.
Cambios en el contexto internacional y nacional
Trump asume en un contexto internacional complejo, marcado por el conflicto en Ucrania y la tensión entre China y Taiwán.
Durante su mandato anterior, ya se había enfrentado a situaciones similares, pero el contexto escaló: la invasión rusa desgastó a Ucrania, mientras que en Asia, China incrementa su presencia militar en torno a Taiwán, lo que desafía la estabilidad regional.
La relación de EE.UU. con estos países será crítica, y Trump prometió enfrentar estos temas con un enfoque directo y negociador, donde incluyó posibles diálogos con Rusia y China para reducir tensiones.
Seguridad nacional y alianzas
En Medio Oriente, Trump enfrentará una situación delicada con la guerra en Gaza y la intervención de Irán. Su experiencia anterior podría influir en decisiones estratégicas, especialmente si continúa con el apoyo a Israel frente a sus amenazas.
Trump ya demostró su enfoque en 2020 con la eliminación del general iraní Qassem Soleimani y podría mantener una postura similar si la situación se intensifica antes de su toma de posesión.
Desafíos internos y posibles políticas económicas
En el plano doméstico, Trump se comprometió a reducir los impuestos y a manejar la inflación, factores que afectaron la administración de Biden y Harris.
Entre sus planes, se destaca un incremento en los aranceles a productos chinos, una estrategia que apunta a reforzar la economía estadounidense y proteger el empleo nacional.
Con el Senado ahora controlado por los republicanos, su administración tendrá más facilidades para implementar políticas y nombrar jueces y funcionarios de su confianza, algo que consolida su agenda en un país aún dividido.
Un retorno con retos y promesas
Trump regresa con la promesa de "terminar guerras y no empezarlas", en sus propias palabras. Con una agenda que prioriza la economía y la seguridad en un contexto global cada vez más conflictivo, su segundo mandato promete ser desafiante tanto en casa como en el exterior, en un mundo distinto al que dejó en 2021.